«En los próximos cinco años, el mundo incorporará tanta energía renovable como en los 20 años anteriores», señaló el director ejecutivo de la organización, Fatih Birol.
Recientemente, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) informó que el crecimiento de la capacidad mundial de energía renovable podría duplicarse durante los próximos cinco años, como consecuencia de la preocupación por la seguridad energética tras la invasión de Rusia a Ucrania.
Asimismo, en su informe anual acerca de las perspectivas en torno a las energías renovables, la AIE indicó que posiblemente la capacidad mundial crezca en 2 400 gigavatios (GW) (lo cual es equivalente a toda la capacidad energética de China actualmente), hasta alcanzar los 5 640 GW en 2027.
De acuerdo a estas proyecciones, se puede señalar que el aumento es 30 % más alto del previsto hace un año. Las tecnologías de energía renovable son cada vez más atractivas debido a su importancia en el acelerado proceso de transición energética que se vive en el mundo, así como a los elevados precios del gas y la electricidad derivados de la crisis energética internacional de este año.
En este sentido, cabe mencionar que países como Estados Unidos, China e India están impulsando el crecimiento de las energías renovables, y al mismo tiempo están aplicando normas y reformas de mercado para promover su despliegue de una manera más rápida de lo previsto.
«Las energías renovables ya se estaban expandiendo rápidamente, pero la crisis energética mundial las ha llevado a una nueva fase extraordinaria de crecimiento aún más rápido, ya que los países tratan de aprovechar sus beneficios en materia de seguridad energética», manifestó el director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol.
El informe del AIE también señala que las energías renovables representarán más del 90 % de la expansión de la electricidad mundial en los próximos cinco años, y superarán al carbón para convertirse en la mayor fuente de electricidad mundial a principios de 2025. Además, la capacidad solar fotovoltaica mundial podría triplicarse al 2027, convirtiéndose así, en la mayor fuente de energía del mundo. Asimismo, se prevé que la capacidad eólica podría duplicarse.
