Daniel Cámac, presidente de H2 Perú, ha afirmado que la minería formal en el país está firmemente comprometida con la reducción de emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI). Según Cámac, el 80% de las compañías mineras en Perú están interesadas en adoptar el hidrógeno verde, un vector energético que contará con un reglamento oficial en los próximos meses.
En una entrevista para «Diálogos Mineros», producido por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP), Cámac mencionó que la mayoría de las empresas mineras que operan en el país forman parte de H2 Perú y están involucradas en estudios y análisis. «Debemos tener el 80% de las compañías de producción de mineral,» destacó.
Cámac también subrayó que las principales empresas mineras buscan reducir sus emisiones entre un 30% y 40% para el 2030. «En esta década es importante tomar acción para reducir las emisiones que tenemos. Las compañías mineras no solamente quieren quedarse en reducir 30% sino llegar a ser carbono neutral o Net Zero al 2050. La minería quizás va a ser uno de los principales consumidores de hidrógeno para descarbonizar muchos de sus procesos,» refirió el especialista.
En cuanto al suministro eléctrico, Cámac explicó que las empresas mineras buscan que provenga de energías renovables, además de ser potente y constante. Destacó que algunas empresas utilizan camiones de 100 o 150 toneladas que funcionan con diésel, lo que implica un consumo muy intenso de energía. «Luego otros camiones llevan el metal hasta las concentradoras, donde finalmente se identifica el mineral. Después, ese mineral procesado se lleva hacia los puertos, para lo que se utilizan camiones o trenes,» comentó.
Cámac prevé que en el futuro se podría cambiar a hidrógeno verde, una fuente de energía limpia que solo emite vapor de agua y no contamina. «Si queremos reemplazar el diésel, necesitamos una buena capacidad de generación eléctrica renovable, y Perú tiene una oferta enorme,» añadió.
El experto mencionó que hace un par de años se llevó a cabo un proyecto piloto muy relevante en Sudáfrica, donde se probó el uso de hidrógeno en camiones de hasta 300 o 400 toneladas. Además, en Chile también se ha completado recientemente un proyecto similar, demostrando que el hidrógeno es una fuente viable para aplicaciones reales en los próximos años. «La implementación dependerá nuevamente de las regulaciones, los incentivos y las economías, a medida que las energías renovables sigan disminuyendo su precio,» concluyó.