En medio de preocupaciones sobre el impacto de unas tasas de interés más altas y prolongadas en la demanda de metales, así como un aumento en los inventarios, los precios del cobre continuaron su tendencia a la baja. El cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME) registró una caída del 1%, alcanzando los 8.278 dólares por tonelada métrica a las 1000 GMT, después de una disminución del 0,6% en la sesión anterior.
Aunque no se anticipa que la Reserva Federal de Estados Unidos aumente las tasas durante su próxima reunión, la perspectiva de mantenerlas en niveles elevados para controlar la inflación ha generado incertidumbre en los mercados financieros.
Nitesh Shah, estratega de materias primas de WisdomTree, explicó: «Esperamos tasas más altas durante más tiempo porque la fortaleza de los datos económicos es en gran medida favorable y, aunque la inflación se está enfriando, aún no estamos fuera de peligro, especialmente con los precios de la energía reavivándose».
Además, el crecimiento económico en China se mantiene mediocre, lo que ha llevado al país a implementar medidas de estímulo moderadas. No obstante, los inversores están preocupados por el sector inmobiliario chino con altos niveles de deuda, y el optimismo de las empresas estadounidenses hacia China ha disminuido significativamente.
El contrato de cobre para entrega en octubre en la Bolsa de Futuros de Shanghai también experimentó una caída del 0,8% a 68.790 yuanes (9.426,52 dólares) por tonelada, ampliando las pérdidas después de una disminución del 0,4% el día anterior.
Además de las inquietudes relacionadas con las tasas de interés y el crecimiento económico, la depreciación del yuan chino frente al dólar estadounidense también ejerció presión sobre la demanda china de metales industriales cotizados en dólares.
En este contexto, las existencias en los almacenes regulados por la LME continúan aumentando, lo que refleja un incremento en la oferta en medio de una demanda débil. Las existencias de cobre de la LME han aumentado en un 175% desde mediados de julio, alcanzando las 149.600 toneladas métricas, el nivel más alto desde mayo de 2022.
En relación con otros metales industriales, el aluminio en la LME registró una caída del 0,4% a 2.211 dólares por tonelada, el zinc disminuyó un 2% a 2.494 dólares, el plomo perdió un 1,4% a 2.216,50 dólares, el níquel cayó un 1% a 19.670 dólares y el estaño se desplomó un 1,8% a 25.700 dólares.