La Bear Creek Mining Corporation, bajo la dirección de su gerente general Andrés Franco Longhi, tiene previsto invertir $545 millones en el desarrollo del proyecto minero Corani. Este proyecto, ubicado en el distrito homónimo en la región Puno, a una altitud de 5,200 metros sobre el nivel del mar, se centra en la extracción de plata, plomo y zinc.

Según Franco Longhi, Corani es uno de los proyectos mineros más destacados en el mundo, proyectando una producción anual de alrededor de 10 millones de onzas de plata, así como plomo y zinc. Aunque este tipo de proyectos suele requerir entre $100 y $150 millones de inversión, Corani está planeando invertir $545 millones, lo que representa un compromiso significativo para la empresa.

La financiación es un aspecto clave para hacer realidad este proyecto minero. Franco Longhi mencionó que la compañía está trabajando en asegurar el financiamiento necesario para llevar a cabo la operación de Corani.

Más allá de su impacto económico en la empresa, Franco Longhi enfatiza el papel fundamental que Corani desempeñará en el desarrollo de la región Puno. La operación de la mina contribuirá a través de impuestos, canon y regalías al desarrollo de infraestructura local, como carreteras, colegios, hospitales y electrificación.

La distribución de beneficios será notoria en la región, ya que aproximadamente el 30% de los impuestos, alrededor del 8% de las utilidades y cerca del 6% de las regalías mineras se quedarán en la comunidad. En total, alrededor del 50% de las ganancias generadas se destinarán a compromisos con el Estado peruano.

Franco Longhi también subrayó la importancia de la creación de empleo. Durante la fase de construcción de las instalaciones de la mina Corani se generarán 2,500 puestos de trabajo directos, mientras que la operación continua proporcionará 500 empleos directos.

Además de los aspectos económicos, Franco Longhi resaltó la responsabilidad ambiental. La minería formal, según él, cumple con las regulaciones ambientales y está sujeta a multas y penalizaciones si no se adhiere a estas normativas.

El proyecto Corani también destaca por su enfoque en el desarrollo social y económico de las comunidades en la zona de influencia. Se han llevado a cabo esfuerzos para desarrollar emprendimientos textiles basados en la alpaca, recursos económicos locales que no están relacionados con la minería. Franco Longhi cree que impulsar estas actividades productivas es esencial para construir relaciones positivas con las comunidades.

Bear Creek Mining ha demostrado su compromiso con la innovación productiva. Han desarrollado emprendimientos textiles para la exportación y han creado productos a partir de recursos locales, como hilos de almidón de papa y ladrillos térmicos. La empresa también ha explorado el uso del excremento de las alpacas como fuente de energía.

El proyecto Corani, con sus características de inversión, compromiso social y enfoque en la sostenibilidad, se suma al panorama minero en Puno, contribuyendo al desarrollo regional y a la economía peruana en su conjunto.