Las operaciones de Las Bambas están paralizadas desde el 20 de abril. Rubro hotelero de Challhuahuacho pierde S/ 60 000 al día por paralización.

El seis de mayo, los comuneros de Fuerabamba y Huancuire del distrito de Challhuahuacho, provincia de Cotabambas, región de Apurímac, enviaron una carta dirigida a la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM); en ella manifestaban su intención de dialogar con el Estado el día siete de mayo, tal como lo había propuesto inicialmente el primer ministro Aníbal Torres. Pese a esto, la PCM dispuso que el diálogo sea reprogramado para el día 10 de mayo.

La iniciativa de empezar un diálogo con el Gobierno surge un poco más de una semana después de realizado el desalojo de los comuneros de Fuerabamba del territorio de la compañía minera MMG Las Bambas por parte de la Policía. Cabe recordar que los pobladores de la comunidad tomaron los territorios de la minera desde el 14 de abril, según ellos, como medida de protesta debido a los acuerdos incumplidos por parte de la empresa. Aun cuando existe la disposición de las comunidades para que se concrete el diálogo, los desacuerdos en cuestión de fechas para la realización de la reunión podrían impedir que la cita se lleve a cabo.

«La pelota está en la cancha del Gobierno. A pesar de la posición de las comunidades de que se levante el estado de emergencia, están dando salidas», manifestó el asesor de la comunidad de Fuerabamba, Luis Muñoz.

Por otro lado, también existen desacuerdos en cuanto al lugar donde se podría desarrollar la reunión. En un principio, el premier invitó a la comunidad a trasladarse a Lima, pero también les dio la opción de celebrar el encuentro en el salón comunal de Tambobamba, capital de la provincia de Cotabambas en Apurímac; no obstante, los comuneros propusieron que se desarrolle en Pumamarca, una comunidad de Tambobamba.

El abogado Muñoz expresó que los comuneros han rechazado viajar a Lima porque temen ser encarcelados. Por su parte, la PCM ha insistido en que el encuentro se ejecute en la ciudad de Tambobamba. A su vez, el presidente de la comunidad de Fuerabamba, Edison Vargas, indicó que la comunidad evaluará la propuesta. «La comunidad decidirá si acepta o no», expresó.

En un inicio, los comuneros habían rechazado la invitación al diálogo, pues pedían que antes de cualquier reunión primero se derogase la norma que establece el estado de emergencia por 30 días en los distritos de Challhuahuacho y Coyllurqui, la cual está vigente desde el 28 de abril.

Los comuneros han manifestado que, si la reunión con el Estado se llega a concretar, seguirán firmes en su pedido del levantamiento del estado de emergencia; puesto que, según Muñoz, «la mesa de diálogo estaba en proceso y no correspondía la medida restrictiva».

El día seis de este mes, una comitiva encabezada por el titular de la Secretaría de Gestión Social y Diálogo de la PCM, José Alberto Muro, trató de concertar una reunión con la directiva de la comunidad en el local denominado Instituto; sin embargo, esta propuesta fue rechazada porque los comuneros de Fuerabamba no aceptaron ir a ese lugar, así que convocaron a la comitiva a ir a la zona de Manantiales. Según Vargas, por acuerdo de asamblea se fijó que solo conversarían en esta zona de manera pública y con toda la comunidad presente. Por su parte, la comitiva de la PCM no aceptó esa propuesta.

«(de la PCM) no quisieron venir a Manantiales, pero también la comunidad me ha exigido que no vaya (al lugar que ellos proponían)», explicó el presidente de la comunidad de Fuerabamba.

Se unen más comunidades

Asimismo, Vargas también manifestó que, después de no haberse concretado la reunión con la comisión de la PCM, se reunieron con dirigentes de otras cinco comunidades, tales como: Huancuire, Choaquere, Chila, Pumamarca y Chuycuni. De esta manera, todas las comunidades mencionadas tomaron el acuerdo de unir sus protestas en una sola; por tanto, Vargas expresó que ahora el Gobierno también tendrá que dialogar con todas ellas para llegar a un consenso. Al referirse a las cinco comunidades aliadas, Vargas añadió que «directa o indirectamente también son afectadas por la minera por diversos compromisos incumplidos».

«Se ha hecho un pacto y desde ahora seremos una sola comunidad. La convocatoria tiene que ser para todos», acotó el presidente de la comunidad de Fuerabamba.