En medio de los altos precios del oro y la falta de importantes descubrimientos de yacimientos, la empresa minera Apumayo está centrando sus esfuerzos en el desarrollo del proyecto de óxidos de oro Ancos en Ayacucho. Además, la compañía está explorando dos prospectos de cobre en el sur de Perú y considerando la posibilidad de adquisiciones en Norteamérica.
Guillermo Shinno, gerente general de Apumayo, reveló que el cierre de la mina aurífera del mismo nombre en Ayacucho está en marcha y se espera su conclusión en dos años y medio debido al vencimiento de los permisos y la reducción de reservas. Al mismo tiempo, la compañía está avanzando hacia la ejecución del proyecto Ancos en la misma región.
«Estimamos presentar el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de Ancos a mediados del próximo año y esperamos que su aprobación no tome mucho tiempo, para comenzar la producción a mediados o finales de 2025», comentó Shinno. Se estima que este proyecto requerirá una inversión de US$ 100 millones por parte de la empresa.
El proyecto de Ancos tiene una vida útil de siete años, pero las exploraciones en curso han identificado recursos que podrían permitir una ampliación de la explotación a 10 años. Apumayo busca prolongar sus operaciones auríferas, pero también ha despertado interés en el cobre.
En cuanto a los prospectos de cobre a cargo de empresas vinculadas en regiones del sur de Perú, Shinno mencionó que el metal rojo predomina en los recursos identificados. Apumayo está negociando «joint ventures» con mineras locales y extranjeras para desarrollar estos proyectos, ya que considera que dos de ellos podrían convertirse en megaproyectos.
Aunque los precios del cobre han experimentado una tendencia a la baja debido al deterioro de la demanda de China, Shinno destacó el creciente requerimiento de este metal para proyectos de transición energética y la electromovilidad, lo que permite prever una recuperación a mediano y largo plazo.
Apumayo también está evaluando oportunidades de compra tanto en Perú como en el extranjero, ante la falta de recientes descubrimientos de yacimientos de oro de clase mundial. Shinno mencionó que han recibido interés de terceros por sus propiedades y están revisando opciones en Norteamérica y Sudamérica. La empresa está estudiando la adquisición de un proyecto en México y también está explorando una iniciativa en Ecuador.
Sin embargo, se espera que estas transacciones no se concreten este año debido a los análisis geológicos necesarios y otros factores como la conflictividad social, la regulación y la amenaza de actividades ilegales que deben ser evaluadas en cada país.
En otro aspecto, la producción nacional de oro ha experimentado una disminución debido al agotamiento de las reservas en la mina Yanacocha, considerada la más grande de Sudamérica. En los primeros cuatro meses de 2023, la producción de oro en Perú se redujo en un 2.4%, alcanzando los 29.5 millones de gramos finos. Poderosa fue la principal productora en ese período, seguida de Yanacocha y Consorcio Minero Horizonte, según datos del Ministerio de Energía y Minas.
Fuente: Gestión.